25.2.09

La Alta Ruta.


Este sábado la Federación Asturiana de Montaña organizó la primera Alta Ruta de esquí de montaña que une las dos estaciones de esquí que tenemos en Asturies.




Es un palizón de 45 km. y 3.ooo metros de desnivel que nos parecía excesivo por la distancia y sobre todo por el madrugón que había que meterse. ¡Se comenzaba a las 3 de la mañana!.

Había una versión "reducida" que en casi la mitad de recorrido subía un total de 1.550 metros de desnivel en 23 Km. de extraordinario recorrido que va del Puertu Piedrafita al Puertu Braña.
Nos apuntamos a ésta.

Desde Euskadi se vinieron Aitor, Ibai y Naiara que me dieron una alegría enorme con su visita. Hacía ya tiempo que no los veía... bueno, sobre todo a Naiara porque la conocí este fin de semana.



En el numeroso grupo de montañeros-esquiadores que nos inscribimos en la prueba había cantidad de amigos. El tiempo se comportó y fue plenamente anticiclónico. Con estos ingredientes el resultado fue un glorioso día de esquí y montaña.

La organización fue espléndida: traslado en bus, avituallamientos en la ruta, equipos de rescate preparados y espicha final con regalos para todos.Nos dieron hasta medalla conmemorativa.



Ya era hora de que en Asturies se organizara este tipo de rutas no competitivas que sirven para hermanarnos a todos los que practicamos el esquí de montaña.

Tal vez por ese carácter individualista tan típico asturiano se echaba en falta este tipo de travesías colectivas que son muy comunes en otras regiones montañosas. Es una alegría comprobar que también aquí hay gente entusiasta y con iniciativa que pone sus energías en la organización de estos eventos.

Da gusto.

Hicimos la travesía disfrutando de los paisajes, de la nieve y de las charlas entre amigos que compartimos la pasión por las montañas.

En las últimas horas del día ya en mi refugio de La Ḷḷera nos fumamos una shisha (pipa de agua) mientras conversamos hasta que el sueño nos terminó venciendo.



Al día siguiente, con mucha parsimonia nos levantamos, desayunamos, nos calentamos al sol, y para rematar con poderío comimos como curas un clásico de la gastronomía astur: pote y corderu.

¡Había que reponer fuerzas!

Llegó la despedida, pero no fue triste porque pronto nos volveremos a juntar...





...eso seguro.

7 comentarios:

M.Eugenia dijo...

Impresionante, me quedo con la boca abierta....tienes tiempo para todo, para subir, bajar,ganar medalla y luego ocio. Que bien os lo montais.
Un besazo
Las fotos como siempre... una maravilla... te odio.

Duba dijo...

Bueno...ejem... la medalla nos la dieron a los 60 o 70 que participamos. Pero me hizo ilusión. Debe ser la primera que me dan en mi vida.
Besos.

M.Eugenia dijo...

Jajajaja, si te hacen ilusión las medallas ya te traeré una de la Viger del Pilar y la colocas en el gorro (no se como se llama, creo que no es una barretina) que lleva la Santina que se ve en la chimenea.
Besitos

Donpe dijo...

Veo, hermano, con gran preocupación, que no sólo no muestras el más mínimo signo de arrepentimiento, sino que, para más INRI, sigues cayendo en la tentación un fin de semana tras otro. Por si esto fuera poco, te haces acompañar por otr@s pecadores/as venidos de tierras bárbaras, donde no se habla cristiano.
Mucho me temo que estemos ante un caso perdido...

CRISTINA dijo...

Como dice Donpe, lo tuyo no tiene remedio. Reincidiendo en el disfrute de todo tipo.
¡Al infierno de cabeza!

Duba dijo...

¿El sombrero típico asturiano?...se llama "Montera Picona". Uf... deja, deja, que ya tengo bastantes medallas de vírgenes. No ves que mi madre me daba una de la santina cada vez que me iba de viaje para que me protegiera.
Besos.

Duba dijo...

Donpe, Cristina... yo siempre fui de carácter débil, no tengo fuerza de voluntad... por eso ya no me vale con los fines de semana. Ahora intento pasarlo genial también por semana.
Besos y abrazos.