23.9.10

De estreno.


El pasado sábado subí a la cima de una montaña.

Después de tanto tiempo volví a sentirme montañero.

A 2.417 metros de altura, en la cumbre de La Penubina,  experimenté nuevamente la sensación de estar colgado del cielo, atravesé las nubes, el mundo estuvo a mis pies, percibí la fuerza de la naturaleza a mi alrededor.

Sin compañía, sintiendo con más intensidad el silencio y el esfuerzo.

Y para un acontecimiento tan especial fui de estreno total: calzado, mochila y ropa de montaña nuevos.

Incluso estrené una nueva rodilla.


3 comentarios:

Vidal dijo...

Buff!!!... Enhorabuena de todo corazón compañero!!!... Eso, para alguien que ama las montañas, debe ser como volver a nacer de nuevo... Esas nieblas agarradas en los Fontanes, brutales!!!... Un abrazo esgallero!!!

vitor dijo...

Esto marcha viento en popa!!! Ya casi te estoy oyendo gritarme; Mas agresivo, esquia mas agresivo.
Un abrazo Duba.

F dijo...

Qué güay tío, me alegro un montón.