2.3.09

Multiactivo.



Después de pasarme el martes de carnaval, que en Asturies llamamos Antroxu, en el trabajo de guardia, pensé que había que hacer algo más divertido el resto de la semana.

Hacía ya demasiado tiempo que no salía del Planeta Axturias, y eso que en estos últimos días estaba irreconocible con tanto sol.

Cambiar de aires siempre me resulta agradable así que arranqué el coche en La Ḷḷera y lo aparqué en La Pedriza cuatro horas después. Nada más bajarme ya me impregnó el olor a jara y pino. ¡Qué sensación más familiar!.

Olga me estaba esperando con la cuerda y los gatos en la mano y nos fuimos a pasar la tarde como las lagartijas, trepando al sol detrás de casa hasta que los últimos rayos se ocultaron tras la Camorza y las cabras montesas ya no veían ni para pastar.
Caminando al atardecer, de vuelta a casa, con los dedos cansados, la adrenalina liberada en la roca y una agradable sensación de paz interior.






Yo sólo había estado una vez en la estación de esquí de La Pinilla pero no cuenta porque de aquella no tenía apenas nieve, así que ya era hora de volver a visitar la Sierra de Ayllón. Esta vez a darle al telemark y hacer un poco de turismo por tierras segovianas: deslizarse por La Pinilla y pasear por el bonito pueblo de Riaza.

Buena combinación... ¡Olga y yo amortizamos el forfait!








Siguiendo con mi pasión telemarkera el viernes me fui a bajar con los talones libres la cumbre más alta y emblemática de la Sierra de Guadarrama: El Pico Peñalara.
Subí dándolo todo, gocé de ese momento siempre mágico de la cumbre recreándome con las vistas y bajé haciendo mi penitencia de genuflexiones sobre las tablas hasta la misma carretera del Puerto de Cotos.... cansado, feliz y contento.







El sábado había quedado en Gasteiz con Aitortxu y Karlos para irnos a hacer la travesía de esquí de montaña de La Euskal Mendizale Federazioa por el valle de Ansó. Llevaba toda la semana suspirando por ir. Una súbita llamada anunciándome una defunción en la familia trunca mis deseos y me obliga a volver corriendo a casa. Tengo que estar al lado de los mios en estos momentos.

Y me recuerda, con toda su crudeza, que la vida son dos días y que pienso vivirlos con toda la energía y vitalidad que sea capaz.


7 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Qué paso Duba? Esta vez nun puedo decite lo guapes que son les semeyes, nun se que-y pasa a esta computadora que nun me dexa veles. Pero si te pueo mandar un besu y un abrazu n'esti momentu.
Animu tio.

Anónimo dijo...

ke pasa Duba, mira por donde kasi no nos vemos y te emcuentro en la red. Esperamos verte pronto por algun sitio, eso si en la montaña.
Ondo segi et ikusi arte.
Josetxu, Esti eta Aiatz.

Duba dijo...

Dani otru besu y otru abrazu doitelu yo a ti. Gracies.

Duba dijo...

Josetxu!!! ... no se como fuiste capaz de dar conmigo por aquí. Ya me contarás. Yo también espero veros muy pronto en el monte o donde sea.
Ya sabes que aquí en Asturies tienes un amigo que os aprecia muchísimo.
Abrazos.

M.Eugenia dijo...

Mira que eres, si es que no puedes parar, cuando he empezado a leer por un momento he pensado que igual te habías disfrazado de algo... jejjejje... luego lo entendí, vas disfrazado todo el año con los esquís.
Un besazo

Duba dijo...

Uf... Maria Eugenia creo que cuando voy realmente disfrazado es cuando me visto de EPI en la oficina. Tú me entiendes. El resto del tiempo soy yo mismo.
Un beso.

M.Eugenia dijo...

Jajaja.. pues te queda mejor el traje del telemark.
Por cierto Astor Piazoola de fondo... que guay... te recomiendo si no los conoces, Bajofondo Tango Club y Gotan project.
Besos