7.11.12

Cerro Vespignani



Como viene siendo habitual estos últimos años mi periplo patagónico finalizó en El Chaltén.

En esta ocasión fue una "visita de médico". Estuve el tiempo justo para ver a los amigos, pasear por el pueblo y descansar antes de verme inmerso en la vorágine del viaje de vuelta a casa.

Aparentemente el pueblo apenas había cambiado, de hecho me parecía recordar casi todos los edificios. Tal vez algún negocio nuevo, alguna fachada rematada,...pero el mismo espíritu pionero.

Este lugar tan especial siempre está presente en mi memoria y las vivencias que año tras año allí experimento forman parte de mis más queridos recuerdos vitales.


Cordal del Fitz Roy desde la Laguna Azul


La Poincenot, El Fitz y el Eléctrico

El Chaltén


 
Entre ellos uno especialmente grato fue aquel día espléndido de Septiembre de 2011 en que esquiamos el Cerro Vespignani.

Esta es una de las esquiadas más grandiosas que se pueden realizar en el remoto sur de la Patagonia, lejos de "ski resorts" y aglomeraciones de turistas.


Cerro Vespignani  2.146 metros




1.500 metros de desnivel de exquisito "powder patagónico". Un exótico menú que muy pocos han saboreado.

El invierno en estas latitudes es intensamente salvaje y desolado.

Y el entorno es de una belleza sublime: Los lagos del Desierto y O'Higgins/San Martín a nuestros pies y  los Cordales del Cerro Torre y el Fitz Roy a nuestro alrededor constituyen uno de los entornos naturales más espectaculares del planeta.


1 comentario:

Xabi dijo...

Dios güaje!!! se me ponen los pelos como escarpias de imaginar un descenso por esas palas; quizás algún día...¡un abrazo muy fuerte!